Los marcadores indelebles, para cerámica o cristal, son una herramienta extraordinaria para decorar la loza blanca, tazas de café o de capuccino como en este caso, platos y demás objetos de cerámica blanca. Podemos crear nuestra vajilla personalizada totalmente a nuestro gusto, exprimiendo nuestra creatividad o copiando diseños que hayamos visto y nos resulten atractivos. En este artículo os mostramos un sencillo ejemplo que seguro os aporta ideas para vuestra decoración.
En esta decoración personal, la autora se ha decantado por un diseño inspirado en París, su ciudad favorita. Como véis en ésta y podéis también ver en otras decoraciones con marcadores, los estilos sencillos, minimalistas, casi esquemáticos, son los que mejor quedan. Un toque kitsch también queda genial y si no nos atrevemos con el dibujo podemos optar por diseños geométricos que dan un aire étnico muy bonito.
Tomarse un capuccino o invitar a los amigos con vuestras tazas personalizadas os producirá una gran satisfacción, la satisfacción que siempre aportan las cosas hechas por uno mismo.
Los materiales que se necesitan son:
- Tazas de cerámica blanca
- Marcadores, optaremos por marcadores especiales y de buena calidad
- Toallitas húmedas
Para trazar una línea recta alrededor de la taza usaremos unos libros como base para el marcador, los que precisemos para alcanzar la altura a la que queremos realizar el trazo. Ponemos el marcador apoyado sobre los libros y la taza junto a la punta del marcador, giramos la taza y obtendremos un trazo perfecto. Para corregir cualquier fallo o algo que no nos guste usaremos toallitas húmedas para borrar el marcador, antes siempre de que se seque.
Dejaremos secar el marcador durante unas cuatro horas por lo menos. Una vez seco y antes de que transcurran ocho horas de la decoración podemos hornear la cerámica durante 40 minutos en el horno a 190º C, se coloca la cerámica en el horno frío, se enciende éste y cuando alcance la temperatura requerida contamos los 40 minutos. En cada caso concreto seguiremos las instrucciones del marcador que hayamos adquirido por si cambiasen los tiempos y temperaturas. Dejamos enfriar y listo, nuestras tazas serán ahora capaces de soportar el lavavajillas.
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