Después de forrar o pintar la caja de fresas con el diseño que más te guste, puedes darle un uso muy creativo: sembrar plantas y flores. Esta será, literalmente, una forma ideal de dar vida a la caja y sorprender a todos tus familiares e invitados.
Puede ser apropiado agujerear un poco el fondo de la caja y colocar unas piedras encima para que funcione a modo de sistema de drenaje, evitando así que el agua de riego quede encharcada y la madera se pudra. A continuación, deberás llenarla con tierra adecuada para el tipo de planta que quieras poner y, por último, plantar las semillas o trasplantar las plantas a la caja de fresas.
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